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VUELTA DE VACACIONES — ¿Y AHORA QUÉ?

¿Cómo afronto la vuelta a la rutina?

Después de las vacaciones… Olvídate de todo lo que has hecho, empieza con tu rutina habitual. Si habías dejado de lado tus hábitos nutricionales saludables, vuelve a ellos; come más sano, muévete, haz ejercicio, cuida tu descanso y la gestión emocional. Y si aún no lo hacías, es un buen momento para empezar. Puedes empezar por objetivos a corto plazo y hacerlo de forma progresiva con objetivos realistas y sin prisas. Te ayudará preparar menús semanales para organizarte en la compra de la semana y asegurarte que comes lo mejor posible. Retoma tus hábitos alimenticios saludables, no solo para bajar unos kilos, sino también para consolidar un estilo de vida saludable para no volver a aumentar de peso. Sigue una dieta equilibrada consumiendo diariamente 3 piezas de fruta al día, además de incorporar verdura en todas las comidas. Consume proteína de alto valor biológico, grasas de buena calidad (pescado azul, frutos secos…) también cereales integrales ricos en fibra. Manténte hidratado con agua y evita las bebidas alcohólicas y azucaradas.

No menos importante, manténte activo. En verano es normal que nos relajemos y dejemos a un lado el deporte, pero ahora es importante retomar aquella actividad que solías practicar. Establece una rutina de ejercicios que te mantenga activo. Y si no lo hacías, ¿a que esperas para encontrar el que mejor se adapte a ti? Descansa. La falta de descanso produce estrés, cansancio e irritabilidad. Asegúrate que duermes las horas suficientes. Es importante encontrar un plan/hábitos que se adapten a tus necesidades, que te sientas cómodo realizándolo y que no suponga una gran dificultad para llevarlo a cabo. No hagas nada de especial, no te agobies, simplemente vuelve a la rutina, cuidando tu salud y tus hábitos dietéticos nutricionales. Pide ayuda a profesionales que te ayuden en el proceso (nutricionista, psicólogos, entrenadores, médicos…) y te acompañen para no sentirte solo.